EL PLOMO EN LOS COSMÉTICOS

LA VERDAD SOBRE EL PLOMO EN LOS COSMÉTICOS

Los efectos negativos de los productos sobre la piel y el cabello de mis clientas es lo que me ha llevado a investigar cuáles son esos componentes que son nocivos para la salud física  y cuáles  son sus consecuencias.  Hoy les quiero ampliar un poco sobre el PLOMO.  En el 2003 se alarmo a las consumidoras sobre los daños que este compuesto genera en el cuerpo humano. El plomo se detiene en la corriente sanguínea y no es expulsado por el cuerpo  y al generarse una acumulación del mismo; intoxica y puede causar la muerte.  Está presente en la tierra  siendo el polvo uno de sus principales medios de esparsión  siendo los niños los más afectados, por que se adhiere a sus juguetes y llevan las manos a la boca. Está presente en todo tipo de pinturas y colorantes artificiales que incluso son de consumo. En las tuberías y grifos. Mejor dicho está en todas partes. Pero en los cosméticos también hace presencia  ya que es un componente encargado de hacer que los productos tengan adherencia y durabilidad principalmente en los labiales y los tintes para el cabello de tonos negro a castaño, es mucho lo que se ha especulado sobre los daños que causan los labiales de larga duración en correos que circulan por la red pero según estudios realizados por la administración de alimentos y medicamentos (F.D.A.) de los Estados Unidos, dice que la presencia del plomo en pequeñas cantidades no significa un daño para la salud de las personas no obstante hay países en que las leyes de protección del consumidor son muy pobres y se siguen haciendo irresponsablemente este tipo de productos. Mi recomendación como siempre es que en cuestión de productos para el cuidado personal y en este caso los cosméticos miremos hacia lo natural. Miremos con más detenimiento   las marcas y etiquetas de los productos que de verdad si sean de origen natural son muchas las marcas que están siendo vetadas en países que tienen leyes más claras para protección del consumidor,  y que están llegando a nuestro país, que nos envolatan con su buen nombre y trayectoria, que aprovechan las falencias de nuestras leyes; abran los ojos y no se dejen  meter gato por liebre.